viernes, 30 de octubre de 2009

Plática de dos amigos

Photo by
Cordellia

Estaban dos amigos conversando...

-¿Y tú qué le has visto que andas tan enamorado, ah?
-Algo especial, único e insuperable
-No tiene buen cuerpo... Es decir, tiene lo suyo... ¡Pero hay mejores!
-No, imbécil... Su cuerpo no.
-¿Entonces?
-No podría explicártelo. Cuando vi sus ojos por primera vez, sentí que algo recorría todo mi ser. Me sentí, de alguna forma, completo... ¡Sin conocerla del todo!
-Pero sus ojos no son la gran cosa... ¡Esos ojos los encuentras en todo lugar!
-¡No me refiero a eso! Quiero decir que sus ojos me transmitían algo hermoso. Tuvieras que haberlo sentido para entenderlo.
-Bueno, cuando yo veo sus ojos, solo encuentro... ¡Ojos!
-Mejor.
-Oye, pero... ¿Qué tanto te has podido enamorar para resistir tres años con la misma flaca?... Qué aburido, man. Extraño esos tiempos cuando eramos más chibolos y salíamos con cada petiza por un vacilón corto nada más... Pucha, era genial. Aunque, claro... luego de eso nos perseguían con sus llamaditas... ¡Pero era chévere! Ja, ja, ja... ellas también eran unas vaciloneras.
-Ja, ja, ja... Pobres... No sabíamos nada
-¿De qué?
-De que había algo mucho más importante detrás de cada mujer. Nos íbamos de una en una sin ni siquiera darnos el tiempo de conocerlas. Tal vez ninguna nos convenía y por eso no notamos nada especial... Felizmente, conocí a la chica con quien ahora estoy tres años juntos
-Cursi
-Un poco. Pero no me aburro.
-Eso es lo que me pregunto siempre... ¡¿Por qué no te aburres?! Tres años, loco... ¡Tres años!
-Y estoy preparado para más. No me aburro porque para mi ella no es un vacilón. Desde que vi en sus ojos eso que me hacía falta... eso que estaba buscando, supe que ella era para mi y así fue. Encuentro en ella lo que en otra persona no voy a hallar. No es cuestión de palabras dichas de la boca para afuera, es algo que realmente siento y me convence. Algo que inició desde que la conocí y está ahí, en mi corazón, manteniendo viva la relación.
-Puta, loco... Bueno... Será pues. Yo estoy con la misma flaca desde hace tres meses y ya me estoy cansando, la firme.
-No es para tí, entonces. Si te la crees, vas a encontrar a esa persona algún día
-Oe, loco... O sea, ¿Eso quiere decir que tú te vas a casar con ella o qué? ja, ja...
-No sé, el destino es tan inmenso... Por ahora, estoy feliz. Y espero que siga siendo asi por siempre... Yo daré todo de mi, veremos cómo transcurre todo de acuerdo a eso
-Ja,ja... O.k.
-¿Vamos por unas chelas?
-¡¿Chelas?! ¿Ahora? ¡Pero si recién acabas de salir de tu momento cursi! Seguro tienes que ira verla
-No. Estoy enamorado, hombre... ¡Pero no consume mi tiempo completo tampoco! ¡Mi tiempo para los amigos sigue intacto! Así que vamos a tomarnos unas chelas, como los viejos tiempos... ¡Apura!
-Ja, ja... O.k. loco... Si tú pagas: ¡Chévere!
-'Tss... Yaa, weon'... ja,ja... Vamos.


jueves, 29 de octubre de 2009

Lo que queda de la vida

Photo of
Al levantarme, las mañanas son negras
con un televisor prendido que en las mañanas despierta.
Se espera ver algo que te anime ir al trabajo,
pero con lo que ves ya estás extenuado.
¿Qué miras? muerte
¿Qué escuchas? muerte
¿Qué te rodea? muerte
¿Qué te despierta? la muerte

La vida no es vida. La vida es muerte.
Miras la pantalla y quedas anodadado:
Un padre que mata a sus hijos y luego,
se asesina a cuchillazos.

"¿Qué es esto?" "¿Ya no existen los humanos?"
Continúan las noticias y aparece la foto de una niña.
'Desparecida' dice al pie de la fotografía
y después se aclara que la secuestraron el pasado día

"¿Es la vida un juego?" "¿Es la vida un precio?" "¿Por qué sucede esto?"
Te vas a preguntar, pero no hallarás respuestas... Simplemente no las vas a encontrar.
La vida se complica, la muerte se hace visible cada día... La vida cada vez pierde su valor.
Robos, asaltos, violaciones, asesinatos: El ser humano ya no tiene corazón.

Y cuando ves hasta cómo un animal quiere más a su cría,
una lágrima va a resbalar por tu mejilla y te atormentarás con la pregunta_:
"¿Qué es lo qué está ocurriendo hoy en día...?" "¿Dónde está Dios hoy día?"
y tu fe puede caer, por un momento puedes dejar de creer... así sepas que él no tiene culpas.

Ahora qué hacer... Dime, ¿Qué hacer? Si las noticias te enferman, te ahogan y envenenan.
Ya no querrás prender el televisor, preferirás escuchar música para poder levantarte...
pero no podrás escapar... las noticias continuarán... y tú seguirás cuestionándole al aire:
"¿Cuándo llegará el fin de tanta maldad, de tanta crueldad... de tanta inumanidad?"

Tendrás que aceptar que la vida es un campo de batalla.
Están los buenos, están los malos... mueren los buenos, mueren los malos.
tú decides a qué bando pertenecer, porque conforme crezcas te tendrás que defender.
Y, al final, aceptarás que esta es la vida: Un mundo para los buenos y malos... y así se vive,
hasta que llegue el día glorioso en que estemos tomados todos de las manos.


El olvido


Photo by
Te olvidaste, ¿Verdad?
Dejaste muy atrás el pasado diciembre,
que dio comienzo a todo y termina en noviembre.

Te olvidaste, ¿No es así?
Aniquilaste todo regalo tallado en tu mente
y tu presencia, mi regalo, se hizo más ausente.

Te olvidaste, ¿No es cierto?
de la canción que te canté cuando estabas despierto
y cómo poco a poco te fui entregando mis sueños

Te olvidaste, te olvidaste y te olvidaste...
¿O lo quisiste olvidar?
Ya no puedo afirmar, tampoco negar...
Porque eres distinto, ya no es lo mismo: Me olvidaste...

Y de tu corazón me sacaste
en la soledad me abandonaste
y no hay remedio para curarse...
Lo único que queda es también olvidarte.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Fruto de vida


Te veías precioso.
Tu piel era suavísima como mismo algodón pima
y esto lo sentía cuando besaba tus mejillas.

Te veías pequeño.
Podías caber en una sola de mis manos y cuando
estabas en mis brazos sobraba aún espacio.

Te veías dulce.
Tus ojos cerrados eran expresión de ternura
y tu boca tan fina derramaba dulzura.

Te sostuve y te miré,
no había ser más lindo al que en mi vida contemplé.
Podía afirmar que eras de lo visto lo más bello,
asi fueras traído recién de los cielos.

Porque tú eras un ángel, viniste del cielo
y llegaste a la vida para ser mi pequeño.
Y te abracé. Te miré y pensé de inmediato...
que no había nadie a quien yo amara tanto.

Sentía amor. Un amor no antes conocido,
un amor que no poseía un fin ni condiciones,
un amor que no buscaba justificaciones.
Un amor que no puedo sentir ahora,
un amor que solo ha quedado en mi memoria.

Porque fuiste un sueño. Eso has sido: un sueño.
Desperté y no te encontré, eras parte de mi sueño.
Algún día nos conoceremos... algún día muy lejano
te cargaré, abrazaré y sin pensarlo dos veces yo diré "Te amo."

miércoles, 14 de octubre de 2009

Luyanosveremos

photo of
Se supone que debería estar estudiando en este momento para el examen de matemática del sábado, pero he elegido quedarme un rato en la sala de cómputo de mi universidad porque recién acabo de salir de un examen y mi cabeza explota de agotamiento. Vale un merecido descanso de media hora antes de seguir con el extenuante estudio.
Hace muchos días que no entro al blog y la necesidad se siente asi no tenga tiempo de escribir algo, por eso tengo ganas de escribir sobre lo que sea ahora... no sabía exactamente pero ahora ya tengo una idea sobre qué puede ser. Pensé que sería mejor iniciar mirando unas fotos para inspirarme y poder escribir algo nuevo, entonces fue que se me ocurrió tipear en el buscador la palabra Luya. ¿Y qué diablos es Luya?, te preguntarás... bueno, es la provincia de Amazonas (departamento del Perú) donde nació mi papá. Es un lugar al cual tengo mucho cariño porque ahí se encuentra una buena parte de mi familia y también, amigos muy queridos. Es así como opté por escribir sobre este sitio tan bonito que me trae recuerdos únicos y de solo pensar en él tengo unas incontrolables ganas de viajar ya mismo.
La primera vez que fui fue cuando tenía diez años, la idea de estar todo un día entero dentro de un ómnibus para llegar a Amazonas era emocionante. Aunque, como de pequeña siempre he sido miedosa, recuerdo que tenía la sensación de claustrofobia de vez en cuando, aparte del temor por los precipicios. Mi primer viaje sin duda fue algo inolvidable, el motivo por el que fuimos era para celebrar el bautizo de mi primo (en ese tiempo con 4 años), si no hubiera sido por eso tal vez me habría demorado bastante en conocer el lugar donde nació mi querido papá. En ese primer viaje conocí a varias personas, como el popular Don Pancho y su esposa Doña Maggie (amigos de la familia), mi no conocido tío hasta ese entonces: Cesar, mis tres primas hijas del primo de mi padre (un primo muy estimado por la familia) y muchas mas 'tías' (en serio conocí a muchas tías mías) entre las cuales destacan una Tía Lola con su generosidad de siempre y su voz que no deja de escucharse a dos cuadras de la casa y una Tía Yubitzah (a ella ya la conocía de antes, pero en este viaje pude conocerla mejor). Recuerdo que en este viaje fue la primera vez que probé los juanes, deliciosos y sin comparación. Probé por primera vez la auténtica sopa de gallina, el original arroz con pato y, por qué no decirlo, un sabroso cuy. De hecho que también me deleité con el queso luyano, las dulces galletas luyanas y sobretodo: el suave y riquísimo pan. Todo era nuevo para mí, exactamente todo. Conocí nuevos lugares como la Fortaleza de Kuélap, unos cuantos ríos, la misma capital (Chachapoyas) y también pude disfrutar de la tranquilidad de la vida en provincia, porque en Lima yo no podía salir sola tan pequeña. Si no son los inescrupulosos choferes que manejan con feroz velocidad los que acechan contra tu vida, son los inescrupolosos individuos que quieren robarte o, simplemente, molestarte. En Luya era diferente: yo podía caminar por las calles muy tranquila, sin miedo de que me molesten... toda la gente se conocía porque Luya era pequeña... Era algo realmente increíble: la gente dejaba su cosecha en la puerta de su casa, sin miedo de que alguien le robe. Eso era vida.
Después de este viaje vinieron unos tres más: regresé de once años, luego de trece y, por último, de dieciséis. He ido conociendo Luya a través de los años y de hecho que ha ido cambiando. Va teniendo más cosas como: karaokes, más cabinas de internet, arreglos en la pista (asfaltadas) y algunos otros implementos que hace que se modernice. He ido viendo cómo la gente, a pesar de que el tiempo vuele y los haya conocido hace seis años, sigue siendo la misma y te demuestra su cariño de igual forma. Te reciben con amor y te hacen saber que en ellos también tienes una familia.
Mi último viaje fue el año pasado. Como ya tenía diecieséis años, podía pasear con mucha más libertad de la que tenía a los diez. Iba un rato a sentarme y mirar el río, a echarme en la pampa a mirar un rato el cielo, a visitar a mis primas cuando quería... Ser libre, en otras palabras. Fue un viaje divertido, aunque en los últimos días sentía algo de nostalgia. Siempre es así. Lo diferente es que cuando era niña, los últimos días se caracterizaban porque extrañaba a mis muñecas de plástico y, ahora, los últimos días se caracterizaron por extrañar las salidas con mis amigas, al enamorado, mi propio cuarto, etc.
Este año mi papá viaj{o hace practicamente un mes. Cuando lo vi alejándose, sentí demasiada pena porque no iba a verlo en dos semanas... Pero a la vez, me alegré mucho porque sabía que él gozaría de la felicdad de estar de nuevo en su tierra natal. Sabía que disfrutaría de encontrarse de nuevo con sus hermanas, visitar a los amigos, deleitarse con el sabor indescriptible de la comida y, después de un extenuante año de trabajo, relajarse un poco en un ambiente tranquilo... lleno de paz.
Falta un año más para que viaje de nuevo. Tal vez ahora las comodidades ya no son iguales que antes, pero estamos seguros que en el 2011 está en nuestros planes viajar otra vez. Falta mucho, lo veo muy lejano... pero sé que pronto estaré de nuevo con la otra parte de mi familia que se encuentra allá, que podré sentirme libre de la vida atolondrada de la capital. No saben cuánto espero que ya pasen los dos años para regresar, una vez más, a ese divino lugar: Luya.