Después de un año y tres meses

Nuestra amistad comenzó como un pequeño juego,
sin proponérnoslo ésta creció y se volvió algo sincero.
Encontré en ti lo que quería y a esto llamo "un compañero",
que estuvo siempre presente y lo que dio fue verdadero.

Día a día, te convertiste gran parte de mi vida:
pasaste a ser esencial tras el correr de los días.
Te volviste inspiración, el tema de mi poesía...
y yo empecé a sentirme mucho más que una amiga.

Hoy superas lo que diste en cada día del ayer,
pero comparado con mañana es una pequeñez.
Porque el amor que es real crece cada vez...
y lo que sentimos es tan cierto que no podrá caer.

Sé que que en unos años tú y yo habremos cambiado,
pero también sé que no habrás soltado mi mano.
Porque se trata de los dos asi los años hayan pasado,
porque tú y yo logramos todo si en serio lo anhelamos.